La razón que me llevó a incursionar en este pintoresco oficio fue "la olla", tenía que buscar dinero para costearme la universidad. Por esta razón cuidar los niños de las vecinas mientras salían a trabajar era la solución inmediata más atractiva.
Le digo oficio porque aunque al principio comenzó como una alternativa para salir adelante con las deudas del momento, poco a poco fui encontrándole el lado bonito al asunto y me ha ido gustando, con decirles que hasta me cambié de carrera para prepararme profesionalmente para lo que hago, pero ese es otro cuento del que hablaré en otro post.
La Nana Fine siempre fue mi ídola, esa niñera tan moderna que con sus particulares ocurrencias y su forma extravagante de vestir siempre buscaba la forma de darle una lección a los hijos del Sr. Maxwell Sheffield y porque no acababa también educándolo a él y hasta al mayordomo.
Claro está, que en la producción de la vida real de mi serie las cosas son muy diferentes pues lo primero es que no trabajo para un millonario y mucho menos en una mansión, cuido los niños de diferente familias con recursos entre buenos y moderados que les permiten costear la tarifa que pido por disfrutar de la presencia de sus hijos por más de 5 horas. Créanme! aunque algunos niños que hacen esta experiencia muy placentera hay otros angelitos endemoniados que no son tan agradables como quisiéramos. Muchos son reencarnaciones aplatanadas de Danielito el travieso.
Le digo oficio porque aunque al principio comenzó como una alternativa para salir adelante con las deudas del momento, poco a poco fui encontrándole el lado bonito al asunto y me ha ido gustando, con decirles que hasta me cambié de carrera para prepararme profesionalmente para lo que hago, pero ese es otro cuento del que hablaré en otro post.
La Nana Fine siempre fue mi ídola, esa niñera tan moderna que con sus particulares ocurrencias y su forma extravagante de vestir siempre buscaba la forma de darle una lección a los hijos del Sr. Maxwell Sheffield y porque no acababa también educándolo a él y hasta al mayordomo.
Claro está, que en la producción de la vida real de mi serie las cosas son muy diferentes pues lo primero es que no trabajo para un millonario y mucho menos en una mansión, cuido los niños de diferente familias con recursos entre buenos y moderados que les permiten costear la tarifa que pido por disfrutar de la presencia de sus hijos por más de 5 horas. Créanme! aunque algunos niños que hacen esta experiencia muy placentera hay otros angelitos endemoniados que no son tan agradables como quisiéramos. Muchos son reencarnaciones aplatanadas de Danielito el travieso.
Eres la primera persona que conosco, que estudia para este oficio. Espero que puedas prosperar.
ResponderEliminarGracia y paz!
Hola Mayi, mucho gusto en conocerte... espero que este ingreso a la blogósfera sea duradero, para así dar seguimiento a tus anecdotas en tan bello, pero arduo oficio...
ResponderEliminarHola Mayi, un gusto visitar tu espacio, gratificante para mi tu visita al mio, seguiré paseando por acá, besos.
ResponderEliminarwww.lacoctelera.com/naranja
Es bonito cuidar niños, eso si es verdad que hay unos latosisimos.
ResponderEliminar:D
Pero seguramente tendras muchas experiencias divertidas gracias a sus ocurrencias
Saludos, buena semana.
Cuando los niños sean difíciles cuentales historias de terror.
ResponderEliminarSaludos
Es muy lindo trabajar con niños, dímelo a mí que crié los míos jeje, pero no es un mangú. Realmente en la vida nada lo es. Ahora después de vieja me he metido en esto de los blogs que cosa eh? bueno te invito a que me comentes y siquieres me agregues, mi dirección es http://vendomicasa2009.blogspot.com/, hasta pronto, bye.
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